Mis Mensajes al Mundo
Hoy hay un eclipse solar sobre la tierra, que se verá en USA y en Colombia, que es donde me encuentro actualmente. En este mensaje voy a explicar cuál será el destino final de los palestinos y los israelíes. Y también describo más adelante qué son los serafines, que son un tipo de ángel, que tienen un papel que desempeñar allí en la tierra de Israel en el regreso de Yeshua. En estos días en que Israel ha estado en guerra con los palestinos en Gaza, en todo el mundo he visto a personas tomar lados. Algunos se ponen del lado de los palestinos y otros del lado de los israelíes. Todos son ignorantes. No tomen un lado, porque ni los palestinos ni los israelíes tienen razón. Más bien, ponte del lado de Dios y su pueblo que obedece los mandamientos de Dios en la Toráh de Moisés y creen en Yeshua, independientemente de si son israelíes, palestinos o de cualquier otra nacionalidad. La nacionalidad no importa, la obediencia y la creencia es lo que sí importa. Sí, Dios concedió la tierra de Israel al pueblo de Israel, entonces la autoridad de esa tierra pertenece sólo al pueblo de Israel, no a los palestinos. Pero ni los palestinos ni siquiera los israelíes obedecen todos los mandamientos de Dios en la Toráh de Moisés. Los palestinos no consideran la Toráh y no creen en Yeshua. Y los israelíes son sexualmente inmorales, especialmente en Tel Aviv, y todos los israelíes compran y venden con dinero fiduciario, al igual que el resto de las naciones, y tampoco son creyentes en Yeshua. Y el gobierno de Israel es actualmente una forma de gobierno romanizada donde se llevan a cabo elecciones similares a todas las naciones de la tierra, con su propio conjunto de leyes liberales, lo cual es contrario a la forma de gobierno teocrática basada en la Toráh que Dios quería que el pueblo de Israel tuviera. Entonces, a los ojos de Dios, ninguno de los dos tiene derecho a esa tierra.
Y cuando Yeshua regrese, con su ejército extremadamente grande de ángeles poderosos, ambos lados serán desposeídos de la tierra, y él tomará posesión de la tierra y comenzará a gobernarla, y también gobernará sobre el mundo entero desde allí. Él asignará porciones de tierra a 144.000 hijos de Israel que han sido elegidos para ser salvos, los cuales incluirán algunos gentiles que creyeron en Yeshua y obedecieron la Toráh que tenían una ascendencia israelita perdida, y algunos también vendrán de entre los muertos que serán resucitados para llegar a ser estas personas puestas-apartes. Como está escrito, “entonces miré, y he aquí, en el Monte Sión estaba el Cordero, y con él 144.000 que tenían su nombre y el nombre de su Padre escrito en sus frentes”. Apocalipsis 14:1. Y también, “pero tú sigue tu camino hasta el fin. Descansarás y te levantarás a tu herencia al fin de los días”. Daniel 12:13. Y también, “porque el Amo mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel, y con sonido de trompeta de Dios. Y los muertos en el Mashiaj resucitarán primero”. 1 Tesalonicenses 4:16. Y también Abraham, Isaac y Jacob resucitarán para poseer la tierra, entonces la tierra seguirá bajo control israelí, pero no por la población actual de Israel, que será pisoteada casi por completo. Como está escrito, “porque aunque tu pueblo Israel sea como la arena del mar, sólo un resto de ellos volverá”. Isaías 10:22. La actual población israelí de la tierra de Israel será casi totalmente erradicada, y la población palestina será totalmente erradicada. Todos los habitantes desde el río estacional en la ciudad de Arish en Egipto en el sur hasta el río Éufrates alrededor del lago Assad en Siria en el norte serán puestos a la muerte al regreso de Yeshua. Como está escrito, “en aquel día, desde el río Éufrates hasta el río de Egipto, el Amo trillará el grano, y ustedes serán recogidos uno por uno, oh pueblo de Israel”. Isaías 27:12. Y también, “y el lagar fue pisado fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre, tan alta como el freno de un caballo, durante 1.600 estadios”. Apocalipsis 14:20. Y también, “¿qué más había que hacer por mi viña, que yo no haya hecho en ella? Cuando esperaba que diera uvas, ¿por qué dio uvas silvestres? Y ahora les diré lo que le haré a mi viña. Quitaré su cerco, y será devorada. Derribaré su muro, y será pisoteada. La convertiré en un desierto. No será podada ni azada. Y crecerán abrojos y espinos. Mandaré también a las nubes que no llueven lluvia sobre ella. Porque la viña del Amo de los ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá son su plantación agradable. Y él esperaba justicia, pero he aquí, derramamiento de sangre, por justicia, pero he aquí un clamor”. Isaías 5:4-7. Y también, “¿Quién es éste que viene de Edom, de Bosra, con vestiduras carmesíes, el que es espléndido en sus vestiduras, marchando con la grandeza de su fuerza? Soy yo, hablando en justicia, poderoso para salvar. ¿Por qué es tu vestidura rojo, y tus vestidos como los del que pisa el lagar? Yo solo pisé el lagar, y de los pueblos nadie estuvo conmigo. Los pisé en mi ira, y los pisoteé en mi ira. Su sangre salpicó mis vestidos, y manchó toda mi ropa”. Isaías 63:1-3.
Y así, la tierra de Israel será pisoteada, “fuera de la ciudad”, que es la ciudad antigua de Jerusalén, no la Jerusalén moderna. Esto se debe a que la antigua ciudad de Jerusalén se salvará. Pero sólo la mitad de la ciudad dentro de sus murallas sobrevivirá. Como está escrito, “derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén un aliento de favor y súplicas de misericordia, de modo que cuando me vean a mí, a quien perforaron, harán duelo por él, como se llora por un hijo único, y se llora amargamente por él, como se llora por el primogénito”. Zacarías 12:10. Y también, “porque reuniré a todas las naciones contra Jerusalén para la batalla, y la ciudad será tomada y las casas saqueadas y las mujeres violadas. La mitad de la ciudad saldrá al destierro, pero el resto del pueblo no serán quitados de la ciudad”. Zacarías 14:2. Y también, “como pájaros que revolotean, así el Amo de los ejércitos protegerá a Jerusalén. La protegerá y la salvará. La perdonará y la rescatará”. Isaías 31:5.
Entre los que serán pisoteados también estarán los palestinos, incluyendo los de la Franja de Gaza, que en la antigüedad se llamaba Filistea. Por eso está escrito, “No se alegren, oh Filistea, porque la vara que los hirió se ha roto, porque de la raíz de la serpiente saldrá una víbora, de ella brotará un saraf volador. Y el los primogénitos de los pobres pacerán, y los necesitados descansarán seguros, pero yo mataré de hambre tu raíz, y tu remanente será puesto a la muerte. Gime, oh puerta, clama, oh ciudad, desfallece de miedo, oh Filistea, ¡Todos ustedes! Porque del norte sale humo, y no queda ningún rezagado en sus filas”. Isaías 14:29-31. La vara que hirió a los filisteos es el pueblo de Israel, que actualmente está hiriendo a los palestinos en la Franja de Gaza con misiles, y serán rotos con el regreso de Yeshua, así como a los palestinos. Por eso Isaías les dice que no se regocijen cuando vean morir al pueblo de Israel, porque ellos también serán puestos a la muerte. Serán los ángeles enviados al estruendo de la sexta trompeta los que matarán a los actuales habitantes de la tierra de Israel, los cuales serán serafines, como describió Isaías, “saraf volador”. Será un ejército de serafines, por eso está escrito, “no hay ningún rezagado en sus filas”. Estos serafines tendrán dos tareas, matar a un tercio de la humanidad y luego también matar a los habitantes de la tierra de Israel. Los serafines son un tipo distinto de ángel con alas que también tienen autoridad sobre el fuego, que es lo que la palabra hebrea “saraf” significa “quemar”. Lo cual se relaciona con por qué el ángel que tiene autoridad sobre el fuego le dice a otro ángel que recoja las uvas de la ira para pisotearlas en el lagar, porque las uvas son los habitantes de la tierra de Israel y el lagar es la tierra de Israel. Como está escrito, “y salió del altar otro ángel, el ángel que tiene autoridad sobre el fuego, y llamó a gran voz al que tenía la hoz aguda, mete tu hoz y recoge los racimos del vid de la tierra, porque sus uvas están maduras”. Apocalipsis 14:18. Saraf también significa “serpiente” en hebreo. Los serafines también son capaces de transformarse en el fuego mismo, como el ángel que se apareció a Moisés, como llamas de fuego en una zarza ardiente. Como está escrito, “el ángel del Amo se le apareció en una llama de fuego en medio de una zarza. Miró y vio que la zarza ardía, pero no se consumía”. Éxodo 3:3. Y también, “ahora de los ángeles dice, a sus ángeles hace vientos, a sus siervos llamas de fuego”. Hebreos 1:7. Y los serafines también pueden aparecer como caballos de fuego, como vieron Elías y Eliseo. Como está escrito, “y mientras ellos seguían hablando, he aquí carruajes de fuego y caballos de fuego los separaron a los dos. Y Elías subió al cielo en un torbellino”. 2 Reyes 2:11. Y además, “entonces Eliseo oró y dijo, oh Amo, por favor abre sus ojos para que pueda ver. Entonces el Amo abrió los ojos del joven, y vio, y he aquí, el monte estaba lleno de caballos y carros de fuego alrededor de Eliseo”. 2 Reyes 6:17. Estos caballos estaban bajo el control de ángeles que estaban dentro de ellos, guiándolos inteligentemente a donde debían ir, porque sabemos que los ángeles y los demonios también pueden entrar dentro de los animales y controlarlos. Los caballos no son los ángeles en sí, ya que un animal necesita su propio cerebro de caballo independiente para sostener sus propios órganos corporales y mover su propio cuerpo. Nunca en las escrituras hay un ejemplo de ángeles transformándose en animales, pero hay ejemplos de ángeles controlando animales. Los caballos tienen varias ventajas que nuestros cuerpos humanos. Son capaces de galopar rápidamente y también pueden ser montados y también pueden halar un carruaje, que era la forma de transporte que existía en aquellos tiempos antiguos. Estos caballos en particular estaban en llamas de fuego, sin ser consumidos, porque no son caballos ordinarias de la tierra, pero tienen serafines dentro de ellos, ángeles de fuego de Dios, que los controlan para realizar distintas tareas. Recuerda que con Dios todo es posible, porque él tiene el poder de hacer todo posible. Los ángeles también pueden transformarse en la forma de airesoplo, que es una forma invisible. Que es lo que hoy en día se llama “espíritus”, pero en realidad son airesoplos, cuerpos eólicos. Un cuerpo eólico no tiene digestión ni órganos corporales complejos, entonces no requiere de un cerebro distinto para sostenerlo, entonces la mente del cuerpo eólico es la mente del ángel mismo, controlando los movimientos del cuerpo eólico directamente, a diferencia de como los cuerpos eólicos controlan al animal en el que habitan, lo cual es indirecto porque el animal conserva su propia mente separada. Y en esta forma eólica pueden entrar en un cuerpo físico, como el cuerpo de un humano o el cuerpo de un animal. Y una vez dentro, son capaces de controlar el cuerpo, aunque siguen siendo una persona distinta con una mente separada de la mente del cuerpo que habitan. En el caso de estos caballos de fuego, estaban habitados por el cuerpo eólico de un ángel. Los ángeles eran jinetes invisibles que controlaban al caballo no montándolos, sino estando dentro de ellos.
Los ángeles que son enviados al estruendo de la sexta trompeta que matará a un tercio de la humanidad y también a los habitantes de la tierra de Israel se describen figurativamente de la siguiente manera, “entonces el sexto ángel sonó su trompeta, y oí una voz de los cuatro cuernos del altar de oro delante de Dios, diciendo al sexto ángel que tenía la trompeta, suelta a los cuatro ángeles que están atados junto al gran río Éufrates, y los cuatro ángeles que estaban preparados para la hora, el día, el mes y el año, fueron liberados para matar a un tercio de la humanidad. El número de tropas montadas era doscientos millones, escuché su número. Y así vi los caballos en mi visión y los que los montaban, llevaban corazas color de fuego y de zafiro y de azufre, y las cabezas de los caballos eran como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego y humo y azufre. En estas tres plagas fue muerta la tercera parte de la humanidad, en el fuego y humo y azufre saliendo de sus bocas. Porque la fuerza de los caballos está en sus bocas y en sus colas, porque sus colas son como serpientes con cabezas, y por medio de ellas hacen daño”. Apocalipsis 9:13-19. El profeta Joel describe a estos mismos serafines con apariencia de caballos. Como está escrito, “¡Haz sonar el shofar en Sion, haz sonar la alarma en mi montaña puesta-aparte! Tiemblen todos los habitantes de la tierra, porque el día del Amo ha llegado. Está cerca. Un día de oscuridad y tristeza, un día de nubes y espesa oscuridad. Como la oscuridad se extiende sobre las montañas una horda grande y poderosa, como nunca antes la hubo, ni la volverá a haber después de ellos a través de los años de todas las generaciones. El fuego devora delante de ellos, y detrás de ellos una llama arde. La tierra es como el jardín del Edén delante de ellos, pero detrás de ellos un desierto desolado, y nada se les escapa. Su apariencia es como la apariencia de caballos, y como caballos de guerra corren. Como con estruendo de carruajes. Saltan sobre las cimas de las montañas, como el crepitar de una llama de fuego que devora el rastrojo, como un poderoso ejército preparado para la batalla. Ante ellos los pueblos se angustian, todos los rostros palidecen. Como guerreros cargan, como soldados. Escalan el muro, cada uno marcha por su camino, no se desvían de sus senderos. No se empujan unos a otros. Cada uno marcha en su camino. Atravesaron las armas y no fueron detenidos. Saltan sobre la ciudad. Corren sobre las paredes. Suben a las casas. Entran por las ventanas como ladrones. La tierra tiembla ante ellos. Los cielos tiemblan. El sol y la luna se oscurecen y las estrellas retiran su brillo. El Amo pronuncia su voz ante su ejército, porque su campamento es sumamente grande. El que ejecuta su palabra es poderoso. Porque el día del Amo es grande y muy imponente. ¿Quién podrá soportarlo?”. Joel 2:1-11. Doscientos millones de serafines serán enviados para matar a un tercio de la humanidad, que actualmente son alrededor de 8 mil millones de personas que viven en la tierra. Alrededor de 2,66 mil millones de personas morirán de estos 200 millones serafines que serán enviados.
Estos serafines aparecerán en dos formas distintas, en dos días distintos, para dos tareas distintas. En la primera forma, al sonar la sexta trompeta, aparecerán como caballos de fuego, enviados para matar a un tercio de la humanidad. Matarán con fuego, humo y azufre, que ellos ordenarán venir delante de ellos a matar. El estruendo de la sexta trompeta será en Tishri 6, según los tiempos designados por la Toráh. Yom Teruah comienza en Tishri 1. Porque Yeshua regresará en el otoño para cumplir los tiempos designados del otoño de la Toráh, así como en su primera venida cumplió los tiempos desingados de la primavera de la Toráh. El estruendo de la sexta trompeta en Tishri 6 será la alarma que sonará en el Monte Sión cuando este ejército de serafines sea enviado. Luego estos mismos serafines aparecerán como ángeles voladores en Tishri 10 en Yom Kipur, para matar a los habitantes de la tierra de Israel. El libro del Apocalipsis describe figurativamente a estos ángeles. Los jinetes tienen corazas de fuego, zafiro y azufre. La coraza simboliza que están listos para hacer la guerra y están protegidos. El fuego simboliza su autoridad sobre el fuego. El zafiro simboliza su autoridad superior como ángeles, como reyes y diosos. El azufre simboliza su autoridad sobre el azufre, lo cual usarán para que su fuego siga ardiendo continuamente y suelte humo tóxico, para matar. Lo cual es el arma que estos ángeles usarán para matar, “fuego, humo y azufre”.
Estos serafines aparecerán en dos formas distintas, en dos días distintos, para dos tareas distintas. En la primera forma, al sonar la sexta trompeta, aparecerán como caballos de fuego, enviados para matar a un tercio de la humanidad. Matarán con fuego, humo y azufre, que ellos ordenarán venir delante de ellos a matar. El estruendo de la sexta trompeta será en Tishri 6, según los tiempos designados por la Toráh. Yom Teruah comienza en Tishri 1. Porque Yeshua regresará en el otoño para cumplir los tiempos designados del otoño de la Toráh, así como en su primera venida cumplió los tiempos desingados de la primavera de la Toráh. El estruendo de la sexta trompeta en Tishri 6 será la alarma que sonará en el Monte Sión cuando este ejército de serafines sea enviado. Luego estos mismos serafines aparecerán como ángeles voladores en Tishri 10 en Yom Kipur, para matar a los habitantes de la tierra de Israel. Es por eso que en el contexto de este ejército de caballos, Joel dice que hagan sonar la alarma y también hacer sonar el shofar en el Monte Sión. Estos son dos sonidos distintos, la alarma es el sonido de la sexta trompeta en Tishri 6, y el shofar es lo que se hace sonar en Tishri 10 en Yom Kipur. El libro del Apocalipsis describe figurativamente a estos ángeles. Los jinetes tienen corazas de fuego, zafiro y azufre. La coraza simboliza que están listos para hacer la guerra y están protegidos. El fuego simboliza su autoridad sobre el fuego. El zafiro simboliza su autoridad superior como ángeles, como reyes y diosos. El azufre simboliza su autoridad sobre el azufre, lo cual usarán para que su fuego siga ardiendo continuamente y suelte humo tóxico, para matar. Lo cual es el arma que estos ángeles usarán para matar, “fuego, humo y azufre”. Los jinetes representan a los propios ángeles, pero los caballos representan la forma en que aparecerán, controlados por los serafines, que serán jinetes invisibles dentro de los caballos de fuego. Los caballos de estos jinetes se describen figurativamente con cabezas de leones, pero colas de serpientes con cabeza. Esto también tiene una interpretación. En la primera forma aparecerán como caballos de fuego, y serán muy espantosos de ver, lo cual está representado por el caballo con cabezas de leones, que es la primera cabeza. Un león es imponente y también causa miedo. Luego aparecerán como ángeles con alas, como serafines, que está representado por la cola de una serpiente con cabeza, que es la segunda cabeza. Recuerde que la palabra hebrea “saraf” no solo se refiere a serafines, sino también a serpientes, entonces la serpiente representa a los serafines en su verdadera forma como ángeles alados. Una “cola” está detrás de la primera cabeza, lo que figurativamente indica que los ángeles representados por la cola que tienen una segunda cabeza vienen después de los ángeles representados por la primera cabeza. Por eso también Isaías afirmam “de la raíz de la serpiente saldrá una víbora, y de ella brotará un saraf volador”. Los “saraf voladores” son su verdadera forma en la que aparecerán, como ángeles alados. En este pasaje de Isaías la “serpiente” son los serafines en la primera forma como caballos de fuego en correlación con el Apocalipsis y Joel, cuando matan a un tercio de la humanidad en Tishri 6 al estruendo de la sexta trompeta, pero luego el “saraf volador” que proviene de ellos son la segunda forma como aparecerán, como ángeles alados, en Tishri 10 en Yom Kipur, cuando maten a los habitantes de la tierra de Israel, que incluye a los palestinos en la Franja de Gaza, que antes era Filistea.
