A lo largo del tiempo, la Toráh de Dios ha cambiado, según la voluntad de Dios, por hombres que tenían el airesoplo puesto-aparte, y se les dio autoridad desde arriba para hacerlo. Es por eso que hasta Moisés, los hermanos fueron permitidos casarse con sus hermanas, porque era necesario que los hijos de Adán se casaran con sus hermanas para poblar toda la tierra. Sin embargo, cuando Moisés vino, quien tuvo la unción, le dio a la humanidad una nueva instrucción que Dios le dio, “no descubrirás la desnudez de tu hermana”. Y así, lo que antes estaba permitido ya fue prohibido. La Toráh de Dios cambió. Más fue requerido bajo Moisés, en el contexto del sexo.
La desnudez de tu hermana no descubrirás…
Levítico 18:9
Y de manera similar, a los hombres se les permitió divorciarse de sus esposas, y a estas mujeres divorciadas se les permitió volver a casarse con otros hombres. Y a los hombres anteriormente se les permitía casarse con más de una esposa, lo cual es la poligamia. Incluso Abraham fue un polígamo, y se casó con Sarah y luego con Agar. Y Sarah también era su hermana, lo cual bajo Moisés, se le hubiera prohibido casarse con ella. Sin embargo, cuando vino Yeshua, no solo prohibió la poligamia, que es repetido por los apóstoles, “esposo a una sola esposa”, sino que Yeshua también prohibió volverse a casar, al decir, “todo el que se divorcia de su esposa y se casa con otra comete adulterio”. Porque el matrimonio ahora es solo entre un hombre y una mujer hasta que la muerte termine el matrimonio.
…y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa, y ella sale de su casa y llega a ser mujer de otro hombre;
Deuteronomio 24:1-2
Si toma para sí otra mujer, no disminuirá a la primera su alimento, ni su ropa, ni su vivienda.
Éxodo 21:10
Y Abram y Nacor tomaron para sí mujeres. El nombre de la mujer de Abram era Sarai, y el nombre de la mujer de Nacor, Milca, hija de Harán, padre de Milca y de Isca.
Génesis 11:29
Además, en realidad es mi hermana, hija de mi padre, pero no hija de mi madre; y vino a ser mi mujer.
Génesis 20:12
Y al cabo de diez años de habitar Abram en la tierra de Canaán, Sarai, mujer de Abram, tomó a su sierva Agar la egipcia, y se la dio a su marido Abram por mujer.
Génesis 16:3
Todo el que se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con la que está divorciada del marido, comete adulterio.
Lucas 16:18
Y él les dijo: Cualquiera que se divorcie de su mujer y se case con otra, comete adulterio contra ella; y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.
Marcos 10:11-12
Un obispo debe ser, pues, irreprochable, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, de conducta decorosa, hospitalario, apto para enseñar,
1 Timoteo 3:2
Que los diáconos sean maridos de una sola mujer, y que gobiernen bien sus hijos y sus propias casas.
1 Timoteo 3:12
Que la viuda sea puesta en la lista solo si no es menor de sesenta años, habiendo sido la esposa de un solo marido,
1 Timoteo 5:9
esto es, si alguno es irreprensible, marido de una sola mujer, que tenga hijos creyentes, no acusados de disolución ni de rebeldía.
Tito 1:6
E incluso si un hombre se divorcia o se separa de su esposa, no se le permite volver a casarse con otra mujer, porque a los ojos de Dios todavía está vinculado a su esposa, y de la misma manera, la esposa todavía está vinculada a su esposo. Por eso la Toráh dice, “los dos se convertirán en una sola carne”. Porque en el principio era la intención de Dios unificar la carne de dos, un hombre y una mujer, en la carne de uno, en matrimonio. Y es por eso que solo la muerte puede terminar un matrimonio, porque es cuando nuestra carne vuelve a la tierra, lo cual por lo tanto pone fin a la unión de la carne de dos en el matrimonio. Y si la esposa muriera, entonces el esposo podría volverse a casar. Y si el esposo muriera, entonces la esposa puede volverse a casar. Pero si el esposo se casara con otra mujer mientras la esposa de la que se divorció todavía está viva, entonces él comete adulterio. Y de la misma manera, si la esposa se casa con otro hombre mientras el esposo del que se divorció todavía está vivo, entonces comete adulterio. Entonces, si un esposo se divorcia o se separa de su esposa, tiene que permanecer sexualmente abstinente o reconciliarse con su esposa. Del mismo modo, la esposa tiene que permanecer sexualmente abstinente o reconciliarse con su esposo. Y debido a este gran cambio que Yeshua le hizo a la Toráh con respecto al matrimonio, es una razón porque quizás sea mejor no casarse, porque un hombre que se casa con una mujer está atado a ella hasta la muerte, sin importar si es una buena esposa o una esposa malvada. Y así, bajo Yeshua ahora se requiere más que bajo Moisés, en el contexto del sexo.
Por tanto el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
Génesis 2:24
Él les dijo: Por la dureza de sus corazones, Moisés les permitió divorciarse de sus mujeres; pero no ha sido así desde el principio.
Mateo 19:8
La mujer está atada mientras el marido vive; pero si el marido muere, está en libertad de casarse con quien desee, solo que en el Amo.
1 Corintios 7:39
Nota: “Solo en el Amo” significa que solo puede casarse con un creyente.
Pues la mujer casada está ligada por la Toráh a su marido mientras él vive; pero si su marido muere, queda libre de la Toráh en cuanto al marido. Así que, mientras vive su marido, será llamada adúltera si ella se une a otro hombre; pero si su marido muere, está libre de la Toráh, de modo que no es adúltera aunque se una a otro hombre.
Romanos 7:2-3
A los casados instruyo, no yo, sino el Amo: Una esposa no debe separarse de su esposo, pero si lo hace, debe permanecer soltera o reconciliarse con su esposo…
1 Corintios 7:10-11
Los discípulos le dijeron: Si así es la relación del hombre con su mujer, es mejor no casarse.
Mateo 19:10
Como tal, cuando los fariseos probaron a Yeshua preguntándole si era legal que un hombre se divorciara de su esposa por cualquier razón, “es legal que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier razón”, él les respondió según lo que ellos le preguntaron, “si un hombre se divorcia de su esposa, excepto por la inmoralidad sexual”. Porque la inmoralidad sexual es la razón que da la Toráh del por qué un hombre puede divorciarse de su esposa, “si encuentra una inmundicia en ella”. Entonces un hombre no puede divorciarse de su esposa por cualquier razón, excepto por la inmoralidad sexual. Y esto es lo que muchos creyentes no entienden, y descartan muchas escrituras y tuercen esta respuesta de Yeshua erróneamente pensando que estaba permitiendo volverse a casar si había adulterio en el matrimonio, sin entender que Yeshua estaba dando a los fariseos la razón del por qué un hombre puede divorciarse de su esposa, por inmoralidad sexual, según lo que preguntaron y según lo que dice la Toráh. Sin embargo, incluso si un hombre se divorcia, tiene que permanecer sexualmente abstinente, de lo contrario, comete adulterio, porque todavía está atado a su esposa hasta la muerte. Del mismo modo, la esposa tiene que permanecer sexualmente abstinente, de lo contrario, comete adulterio. Y más tarde, Paul también da otra razón del por qué una pareja casada puede permanecer separada, y eso es si un cónyuge incrédulo se va. No están obligados a permanecer juntos. Aun así, ambos tienen que permanecer sexualmente abstinentes o reconciliarse entre sí.
Y se acercaron a él algunos fariseos para probarle, diciendo: ¿Es legal un hombre divorciarse de su mujer por cualquier razón?
Mateo 19:3
Cuando alguno toma una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable porque ha encontrado una inmundicia en ella, y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa,
Deuteronomio 24:1
Y yo os digo que cualquiera que se divorcie de su mujer, except por inmoralidad sexual, y se case con otra, comete adulterio.
Mateo 19:9
Sin embargo, si el que no es creyente se separa, déjalo que sea así; en tales casos el hermano o la hermana no están obligados. Dios nos ha llamado para vivir en paz.
1 Corintios 7:15
