La Toráh prohíbe comer sangre, que muchos hoy desobedecen al comer cosas como “pudín negro” o “morcilla”,
Y no comeréis sangre, ni de ave ni de animal, en ningún lugar en que habitéis.
Levítico 7:26
Si cualquier hombre de la casa de Israel, o de los forasteros que residen entre ellos, come sangre, yo pondré mi rostro contra esa persona que coma sangre, y la cortaré de entre su pueblo.
Levítico 17:10
Sólo que no comeréis la sangre; la derramaréis como agua sobre la tierra.
Deuteronomio 12:16
Sólo que no comerás su sangre; la derramarás como agua sobre la tierra.
Deuteronomio 15:23
Lo cual también incluye no comer carne que aún tiene sangre, por eso los apóstoles no solo repitieron el mandamiento de la Toráh de no comer sangre, sino también de no comer nada estrangulado, ya que un animal estrangulado no ha sido drenado correctamente de toda su sangre,
No comeréis cosa alguna con su sangre…
Levítico 19:26
Y avisaron a Saúl, diciéndole: He aquí, el pueblo está pecando contra el Amo, comiendo carne con la sangre. Y él dijo: Habéis obrado pérfidamente. Traedme hoy una piedra grande.
1 Samuel 14:33
Y Saúl añadió: Dispersaos entre el pueblo, y decidles: “Tráigame cada uno de vosotros su buey o su oveja; matadlos aquí y comed, pero no pequéis contra el Amo comiendo carne con sangre.” Y aquella noche todo el pueblo trajo cada cual su buey consigo, y los mataron allí.
1 Samuel 14:34
sino que les escribamos que se abstengan de cosas contaminadas por los ídolos, de fornicación, de lo estrangulado y de sangre.
Hechos 15:20
que os abstengáis de cosas sacrificadas a los ídolos, de sangre, de lo estrangulado y de fornicación. Si os guardáis de tales cosas, bien haréis. Pasadlo bien.
Hechos 15:29
Porque en la sangre es donde está el alma, por eso tiene que ser drenado completamente de la carne de un animal antes de ser comido, lo cual Dios ordenó desde el principio cuando le dio al hombre la autoridad para comer animales, que fue cuando llegó Noé salió del arca,
Todo lo que se mueve y tiene vida os será para alimento: todo os lo doy como os di la hierba verde.
Génesis 9:3
Pero la carne con su alma, que es su sangre, no comeréis.
Génesis 9:4
Solamente ten cuidado con esto, que no comas la sangre; porque la sangre es el alma; y no has de comer el alma juntamente con su carne.
Deuteronomio 12:23
Porque el alma de toda carne está en su sangre; por tanto he dicho a los hijos de Israel: No comeréis la sangre de ninguna carne, porque el alma de toda carne es su sangre; cualquiera que la comiere será cortado.
Levítico 17:14
Y es por eso que cuando el Mesías derramó su sangre, derramó su alma, en cumplimiento de profecía, para hacer expiación por su pueblo, por que el alma que está en la sangre hace expiación por el alma de otro,
Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y a los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su alma hasta la muerte, y fue contado con los rebeldes, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.
Isaiah 53:12
Asimismo también tomó y les dio el vaso, después que hubo cenado, diciendo: Este vaso es el Nuevo Testamento en mi sangre, que por vosotros se derrama.
Lucas 22:20
Porque el alma de la carne en la sangre está; y yo os la he dado para reconciliar vuestras almas sobre el altar; por lo cual la misma sangre hará expiación por el alma.
Leviticus 17:11
El mismo es la expiación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo entero.
1 Juan 2:2
Por tanto, tenía que ser hecho semejante a sus hermanos en todo, a fin de que llegara a ser un misericordioso y fiel sumo sacerdote en las cosas que a Dios atañen, para hacer expiación por los pecados del pueblo.
Hebreos 2:17
Lo cual implica donar y recibir transfusiones de sangre también es pecado, ya que si el mero acto de comer la sangre de un animal es pecado, cuánto más es pecado inyectar la sangre de otra persona en el cuerpo, incluso si la transfusión de sangre salvaría la la vida de la persona, ya que Dios si designa que tales situaciones ocurran para probar si el hombre transgrediría su mandamiento o no, en lugar de buscar a Dios para la vida y la sanación del cuerpo, a través de la obediencia de sus mandamientos en la Toráh y la creencia en Yeshua y oración,
Como tal, para drenar la toda la sangre de un animal, el animal debe ser colgado boca abajo y decapitado, para luego dejar que la sangre se drene de su carne mientras que su corazón también expulsa sangre en sus últimos latidos, luego, una vez que la carne sea cortado de su cuerpo, la carne deber ser lavado, luego la carne debe ser sumergido y dejado en agua durante al menos 1/2 hora y no más de 24 horas, luego debe ser lavado con agua, luego se puede repetir el proceso de sumersión y lavado una o dos veces más, luego cortar cualquier coágulo de sangre visible, luego agregue sal a la carne, y luego la carne estará lista para ser cocinado y comido.